"Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones" Constitución Española, art. 16.3
La web Laicismo.org ha comenzado una campaña de recogida de firmas para acabar con la financiación de la iglesia por parte del estado, la retirada de la asignación tributaria y derogar el Concordato y de los acuerdos de 1979 (Tercerainformacion.es 07/08/10).
Una financiación que supone al estado 6.000 millones de euros y que, naturalmente, no crecen en los setos de La Moncloa ni en ningún bonsái olvidado antaño. 6.000 millones de euros que salen de los bolsillos de los contribuyentes, católicos, no católicos y de otras confesiosiones. 252 de esos 6.000 millones pertenecen al IRPF y “Este sistema no implica quienes marquen la casilla pagan a la ICAR, sino que se quita de los recursos disponibles de Hacienda. Que lo pagamos entre todos” (Manuel Navarro Lamolda Secretario de Granada Laica 15/11/06). Ese dinero se desvía de su fin público, y por tanto en beneficio de todos, para financiar una actividad privada, es decir para unos pocos. Para financiar el culto y a su clero, propaganda contra la libertad sexual, interferir en el estado y demás lindezas con las que nos deleitan un día tras otro ( Una iglesia sin reparos en amparar actitudes abusivas y despreciables de su clero y pensando que debemos aplaudir que ahora, por primera vez identifiquen la pornografía infantil como infracción grave y la obligación de la diócesis de denunciar al cura pederasta. La sin vergüenza no tiene límites.
Esta es la gente que se beneficia del dinero público y que junto a la banca, la patronal y la nobleza, poseedores de ingentes fortunas y siendo culpables y cómplices de la crisis económica y de valores que sufrimos se los sigue ayudando constantemente como si fueran pilares de la sociedad. Mientras, a los verdaderos pilares de la sociedad, la clase trabajadora y estudiantil, la que realmente es productiva y generadora de riqueza, se la machaca continuamente para que acabe como sierva de estas elites parasitas e inservibles que solo saben subsistir del trabajo de los demás.
No podemos seguir permaneciendo inmóviles ante esta forma de sociedad que nos quieren hacer asumir con engaño y medias tintas.
Por eso no solo aplaudo esta iniciativa de Laicismo.org sino que animo a todos a firmar y hacerla llegar a más gente.
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